jueves, 11 de junio de 2015

La Amargada

¡Cuántas veces sentimos que no podemos seguir adelante!
Son momentos en los que parece que cada paso que damos es en vano, que no nos conducen a ninguna parte, que todos días y las horas son iguales y no hay motivos para sonreír o mirar la vida con alegría.
Y siempre estamos diciendo que no podemos rendirnos, que hay que seguir adelante, que por más oscura que sea la noche, volverá a salir el sol, que siempre hay esperanzas… y que jamás debiéramos permitir que una persona nos quite hasta las ganas de respirar.
¿Es normal que si te falla tu pareja, tu vida ya no valga nada?
¿De verdad hay alguien que merezca tener ese poder sobre nosotras?¿Alguien que valga más que tu propia existencia? ¿De verdad queremos que alguien sea tan importante y necesario para nosotras, como para declararnos irremediablemente inútiles sin él?
Una historia cotidiana: Una mujer se enamora, deposita todo su amor y confianza en un hombre… Con el tiempo, él se da cuenta de que ella no significa nada en su vida, que ha sido un bonito pasatiempo, un juguete nuevo… mientras que para ella, él era toda su existencia.
¿Cuál era la verdadera diferencia entre el amor de él y ella?

Él te quería, y tú le amabas

Son dos sentimientos diferentes, en ese terreno si no estás preparada te va a ocurrir una y otra vez, porque amas sin medidas. No lo hagas, eso debe cambiar: tanto te dan, tanto das. Pero te preguntarás cómo vas a poder controlar esos sentimientos, ¿verdad? Muy fácil, amando en forma consiente y madura, no puedes pasar la vida llorando lágrimas por personas que no lo merecen, debes valorar tu cuerpo, tu vida, tu corazón.
Como bella mujer que eres, también debes tener la mente abierta para que afloren de ti razones poderosas de ser esa mujer fuerte que todas tenemos que ser. No caminemos por la vida con los ojos llorosos, llena de ojeras y fea. ¡NO! Tú tienes el poder en tus manos, las mujeres deben ser amadas y si esa persona no ve nada bueno en ti, pues a dejarlo ir y seguir adelante.No eres la primera, ni serás la última que vivirá estos amores tormentosos, así que vamos a poner en práctica lo que hablamos, ¿me sigues?

Cuando debes dejar ir un mal amor:

  • Lo mejor es prevenirlo, así que desde antes de empezar una relación, utiliza tu intuición, que de eso las mujeres tenemos mucho. Si ves que te habla cuando quiere, que nunca está cuando le necesitas, ve saliendo de esa relación, cuanto antes mejor.
  • Ya estás ilusionada con él, tu vida ya es bonita junto a él… pero de repente de un día para otro ya no tiene tiempo para ti, que si mucho trabajo, que si tiene compromisos con otras personas o trabajos… lentamente ves que te vas quedando de lado y la tristeza se va alojando en tu cuerpo.
  • Eres tú la que siempre buscas la manera de encontrarle, de poder hablar con él, de esperar siempre esa llamada que nunca llega.
  • Estás pasando por situaciones que hacen de tu vida un caos y le necesitas, pero que pena, ¡otra vez no le encuentras!
  • Ya le has dado todo de ti, hasta lo que pensabas que era imposible dar, se lo has dado, ahora ya se aburrió y volvió a su vida, a su gente, a sus amigos y me pregunto ¿y tú? ¿dónde quedas ahí?
…Y podría seguir con muchos más argumentos para ayudarte a salir de esa relación, pero el amor es traicionero y siempre hace lo que quiere. Sólo queda que tú te des cuenta, que en esa relación sólo estás tú: él ya no existe, ¡olvídalo! Lo mejor que puede hacer es irse y tú dejarlo ir; vas a llorar, claro que sí, pero ya sécate las lágrimas que las mujeres somos más que agua y sal. Basta de seguir esperando lo que nunca ha sido para ti, te mereces mejores cosas, no que te rompan el corazón una y otra vez, ¡madura!

Disfruta de estar un tiempo sola.

Necesitabas llorar, ya lo has hecho. Ahora estás sola, pero que no sea sólo porque no te queda remedio, sino porque ahora ves que necesitas un tiempo así, para ti misma, para madurar y crecer… Ahora piensa como mujer inteligente, capaz de controlar sus propios pensamientos y emociones… mujer autosuficiente que cuando está con alguien es por amor y no por necesidad.
Florece como una nueva mujer: la que se encuentra a sí misma, la que ha pasado un infierno y renace siendo una hermosa mujer de paz y luz interior. Estar un tiempo sola te hará muy bien, la soledad no es mala, te darás cuenta que te volverás más sabia. No le temas a la soledad, pues puede llegar a ser tu mejor amiga.
Gracias a esa soledad verás la vida, los amores y las relaciones con otros ojos. Sabrás que nadie merece tus lágrimas, ni tu dolor, porque te mereces todo lo bueno de la vida, no trozos de felicidad a medías.
La vida es para vivirla y disfrutar de ella; y hoy es tu día. ¡Vamos, adelante mujer, que hay muchos peces en el mar!
¡No te quedes con lo peor mereciendo lo mejor!

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